Libros

Antes de adentrarnos en la consideración del texto de ECLESIASTÉS, he considerado oportuno dedicar la primera parte de este trabajo a dos realidades del devenir humano, que entiendo que nos ayudarán luego a comprender mejor este libro. Son la frustración y la angustia.

La motivación más inmediata para plasmar en este libro una dimensión de mi pensamiento cristiano ha sido el contínuo estímulo que he venido recibiendo de distintos hermanos e Iglesias; la dinámica más profunda de esta determinación tendría que buscarla en los rincones menos accesibles de mi alma y presiento que pudiera estar informada por el sincero, pero a la vez humilde deseo de intentar aportar “algo” al compromiso solidario de la comunión cristiana con mis hermanos en la fe y, sobre todo, a la respuesta que demanda el servicio de mi Dios y Salvador Jesucristo.

La exégesis y hermenéutica que presento en esta obra he procurado elaborarlas con una metodología rigurosa y científica en el campo de las ciencias bíblicas. Por consiguiente, el estudio bíblico realizado pretende actualizar conceptos de gran importancia teológica que nos permita una mejor concienciación de nuestra realidad eclesiológica y del peri mundo en el que vivimos inmersos.