Audios | Estudios | Conferencias

Dentro de los temas de ESCATOLOGÍA colgados en esta página Web, éste ocupa la tercera aportación. Para la segunda venida de nuestro Señor Jesucristo se emplean varios vocablos. Los más sobresalientes y de mayor trascendencia son: parusía y epifanía. El primero significa venida y presencia y el segundo manifestación. Ambos términos se ocupan de realidades escatológicas a devenir en el futuro. Tiene que ver con los acontecimientos que se darán en los últimos días de los últimos tiempos. Se trata de los días escatológicos en los que se manifestará el último hombre, el HOMBRE ESCATOLÓGICO por excelencia, para revelarnos a AQUÉL que habita en luz inaccesible, a quién ninguno de los hombres (seres humanos) ha visto, ni pude ver jamás. JESÚS de NAZARET resucitado volverá a esta Tierra para revelar la realidad más profunda, trascendente y inefable de Dios y establecer, en plenitud, el Reino de los Cielos. Al final, en el decir de Charles de Chardin se habrá alcanzado el punto OMEGA y se crearán UN CIELO NUEVO Y UNA TIERRA NUEVA EN LOS CUALES MORE LA JUSTICIA.

    En cuanto el tiempo en que ocurrirán estos acontecimientos, nadie sabe ni el día ni la hora; están contenidos en los ARCANOS de DIOS. Surgen interrogantes importantes, a los que se pretende, con toda humildad, dar una respuesta que pudiera satisfacer nuestras inquietudes. Las demandas que se le hacen al texto bíblico surgen ya, en el siglo primero después de Cristo: ¿Se equivocó el Señor Jesucristo en su predicción escatológica? “De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca” (Mat. 24:34).

    ¿Se vuelve a equivocar el Señor, según el relato de Lucas, cuando afirma que el Reino de Dios ya está presente en sus días? “Preguntado por los fariseos, cuando habría de venir el Reino de Dios, les respondió y dijo: El reino de Dios no vendrá con advertencia, ni dirán:  Helo aquí o helo allí; porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros” (Luc. 17:20-21).

    En los días de Jesús, algunos pensaban que la segunda venida o la Parusía ya había ocurrido, así como la resurrección. Estos pensamientos se deducen de algunos contenidos de alguna carta Pastoral.

En la segunda carta del apóstol Pedro encontramos este interrogante por parte de bastantes personas que se movían ámbito cristiano:  ¿Donde está la promesa de su advenimiento (gr.-parusía)?. Pedro responde con una argumentación acorde con la voluntad de Dios:  2ª P.D. 3:1-18). Desde mi punto de vista, este capitulo es el más claro en cuanto las realidades escatológicas que se devendrán en los últimos días.

    Espero y confío en que esta serie de estudios aporten un pequeño rayo de luz, en medio de un pensamiento escatológico lleno de tinieblas. La racionalización de la Escritura, como diría el reformador español Juan de Valdés nunca nos conducirá a la captación fidedigna de la Verdad Revelada.